¿A qué quiero dedicarme en el futuro? Cómo elegir tu profesión

19 Abr 2023
Nuestro blog
0 Comment
¿A qué quiero dedicarme en el futuro? Cómo elegir tu profesión

Llegó el momento de elegir estudios para poder dedicarnos a la profesión que más nos guste. ¿Cómo acertar? ¿Qué cuestiones debemos tener en cuenta?

profesión

Los que no nacieron con el chip de la vocación integrado

Ya nos han ido preparando durante todo el bachillerato, pero mientras algunas personas tienen muy clara cuál es su profesión soñada desde que iban a primaria y cuál es la carrera que deben estudiar, otras, menos afortunadas, se enfrentan a la EBAU aún con muchas dudas. ¿Qué quiero estudiar? ¿A qué quiero dedicarme? ¿Dónde me veo en unos años? Lo que me gusta ¿tiene salidas profesionales?

Elegir una profesión es una decisión importante que puede tener un impacto muy significativo en nuestras vidas. Veamos qué podemos hacer para facilitarnos la decisión y que podamos encontrar una carrera que nos dé el eTítulo necesario para recorrer el camino profesional que mejor se adapte a nuestros intereses y habilidades.

Un rato de introspección

Antes de comenzar a buscar carreras, es importante que nos conozcamos a nosotros mismos. Debemos preguntarnos qué nos apasiona, qué nos motiva y en qué somos buenos. Ver cuáles son nuestras fortalezas y nuestras debilidades tanto en nuestra personalidad como cara a los estudios. Debemos evaluar cuáles son nuestras habilidades, intereses y personalidad.

Podemos preguntarnos ¿en qué destaco? ¿Qué me gusta hacer? ¿Cuáles son mis valores? ¿Dónde me veo en unos años? ¿Qué creo que será importante para mí en el futuro?

Si tenemos dificultades para responder estas preguntas, podemos realizar pruebas de personalidad o habilidades, hablar con familiares y amigos cercanos o incluso pedir ayuda a un consejero vocacional.

Por ahora no hay que orientar esos pensamientos hacia lo profesional o ni siquiera hacia los grados universitarios. Lo que debemos es pensar en cómo somos nosotros. Hay que mirar primero hacia adentro, que ya vendrá lo demás.

Ahora vamos a por las carreras

Una vez que sepamos cuáles son nuestros intereses y habilidades, debemos comenzar a investigar acerca de las carreras que nos interesan. Busquemos información sobre los requisitos educativos, las habilidades y competencias necesarias, las oportunidades de empleo y las perspectivas de futuro de la carrera.

También es importante que investiguemos sobre las diferentes especializaciones dentro de una carrera, ya que esto puede influir en nuestra elección.

Otras cuestiones en las que debemos pararnos a pensar son las metas a largo plazo que esperamos conseguir con nuestra profesión. Cabe preguntarse, por lo tanto, cosas como ¿qué quiero lograr en mi carrera? ¿Quiero ganar mucho dinero? ¿Me gustaría que mi trabajo sirviera para crear un mundo mejor? ¿Es importante para mí tener un buen equilibrio entre vida laboral y personal?

Los profesionales saben cosas que Google no nos cuenta

Hablar con profesionales que trabajan en el campo que nos interesa es una excelente manera de obtener información de primera mano sobre lo que implica la carrera y las habilidades que necesitaremos. Debemos preguntarles sobre las responsabilidades laborales, las perspectivas de empleo, los requisitos educativos y las oportunidades de crecimiento profesional.

Además, también nos pueden informar de cómo de saturado está el sector, de qué otras formaciones complementarias podrían ayudarnos a tener un trabajo mejor o más estable en el futuro, de qué empresas contratan más u ofrecen mejores condiciones y de muchos otros asuntos.

No hay que agobiarse, encontrar profesionales a los que entrevistar es más sencillo de lo que parece; podemos encontrarlos a través de LinkedIn, asistir a ferias de empleo y eventos relacionados con la carrera que nos interesa, hacer una búsqueda de empresas y pasarnos a preguntar si alguien podría dedicarnos unos minutos, ver si alguien de nuestra familia conoce a alguien que…

No todo es vocación, también hay que valorar las salidas 

Antes de tomar una decisión, es importante que valoremos las oportunidades de encontrar trabajo de la carrera que hemos elegido. Debemos investigar sobre las tendencias de empleo en nuestro lugar de residencia y considerar las perspectivas de crecimiento y estabilidad laboral. Vamos, que nos aseguremos de que podamos estudiar para desarrollar la profesión que elijamos y no para hacer cualquier otra cosa que no nos guste.

La vocación es muy importante, pero si hemos llegado hasta aquí sin tener muy claro a qué queremos dedicarnos es que tampoco nos ha movido una pasión concreta y podemos abrir el campo de opciones.

Es recomendable asegurarse de que la carrera que nos interese tenga buenas perspectivas de empleo y que vayamos a tener la oportunidad de realizar la profesión que nos guste.

Investigar la demanda del mercado laboral en el campo que nos interesa y verificar las tasas de empleo, su proyección en el futuro y el salario promedio es buena idea y aunque estos no son los únicos factores que considerar, la demanda laboral puede ayudarnos a tomar una decisión más informada.

Otros factores que tener en cuenta: la ubicación y el coste

La ubicación geográfica también es un factor importante que debemos considerar al elegir una carrera. Si preferimos vivir en una ciudad o en el campo, o si tenemos la intención de mudarnos a otro país en algún momento, hay tener en cuenta cómo afectará a nuestra carrera.

También sería bueno investigar sobre las oportunidades de trabajo en la ubicación que nos interesa y considerar cómo puede afectar nuestras perspectivas de empleo y nuestra calidad de vida.

Por otro lado, hay que ver lo que nos van a costar nuestros estudios, si vamos a ir a una universidad pública o privada, si tendremos opción a beca porque cumplimos con los requisitos, etc.

No nos apresuremos en tomar una decisión

La elección de una carrera es una decisión importante que no debe tratarse a la ligera. No pasa nada por darse el tiempo necesario. Para mucha gente incluso es necesario tomarse un gap year o año sabático para aprender más cosas y poder tomar una buena decisión. Es nuestro futuro y debemos pensar bien en todas las opciones.

Tampoco debemos tener miedo a equivocarnos o a cambiar de dirección llegado el momento. La elección de una carrera no es para siempre. No es algo absolutamente definitivo. Si después de algunos años descubrimos que nuestra elección no nos hace felices, podemos cambiar el rumbo. Las habilidades y la experiencia que habremos adquirido serán aplicables en muchas otras áreas y tendremos una experiencia y conocimientos diferentes a nuestros nuevos compañeros, lo que será sin duda una ventaja.

 

 

Escrito por  root

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *