9 razones por las que necesitas leer este verano

9 razones por las que necesitas leer este verano

Tanto si has aprobado como si no, hay algo fabuloso que puedes hacer por ti mismo durante las vacaciones de verano: leer.

razones para leer

Son muchas las razones para dedicar tiempo a la lectura. Si has suspendido o no has alcanzado los resultados que esperabas y te toca estudiar este verano, harás bien en pasar leyendo al menos una hora al día; y si has aprobado, mejor, porque podrás leer más.

1 Leer desarrolla tu empatía

Leer novelas nos hace más empáticos. Una investigación publicada en Trends in Cognitive Sciences, realizada por el profesor de psicología aplicada Keith Oatley, defiende que la lectura de novelas de ficción mejora la empatía y las habilidades sociales más que un ensayo o un fiel reflejo histórico.

Según los estudios que Oatley ha llevado a cabo con voluntarios, la lectura de ficción activa el hipocampo, la región del cerebro que se relaciona con el aprendizaje y la memoria, y nos coloca en el lugar del otro.

Las novelas nos permiten ponernos en la situación de los personajes de la trama, y sentir hacia ellos simpatía, compasión, odio… Con ello se activan sentimientos que nos hacen más tolerantes y que nos llevan a pensar en las circunstancias y las intenciones de la gente.

La empatía es absolutamente necesaria en tu vida diaria y lo va a ser en tu desarrollo profesional futuro. Además, el mundo sería mejor si todos supiéramos ponernos en el lugar del otro.

2 Leer despierta tu imaginación

Estás todo el día viendo imágenes, de esas que valen por mil palabras. Pero también necesitas las palabras para que tu mente se ejercite imaginando lo que no ves.

Recrearte en lo que imaginas te permite crear tus propios mapas mentales, inventar tu mundo, poner cara a desconocidos, fabular…; en definitiva, crear.

La creatividad es algo que puedes ejercitar con la lectura y te conviene entrenarla, porque la vas a necesitar siempre, cada día de tu vida.

3 Leer mejora tus habilidades sociales

Los humanos somos sociales por naturaleza. Aprendemos a actuar imitando los modelos de comportamiento de la gente que tenemos alrededor. Pero nuestras relaciones cercanas no exceden las 150 personas (piensa en tu Facebook). La literatura nos permite ampliar esos modelos y anticipar cómo debería ser nuestro trato con ellos.

Cuando lees lo que les ocurre a otros, aprendes de sus errores y aciertos, piensas en cómo resolverías tú las mismas situaciones que viven los personajes del libro, las consecuencias de sus actos, si actúan bien o mal, si saben negociar, cómo podrían haberlo hecho mejor, por qué fracasan, etc.

Esto es de gran utilidad, porque cada día hay que negociar y la lectura nos permite, sin darnos cuenta, entrenar mentalmente las habilidades sociales.

Leer relativiza tus problemas

No solo porque te metes en otra historia y te olvidas de la tuya propia cuando tienes problemas, sino porque en los libros también hay gente que lo pasa mal, que tiene frustraciones, que se enfrenta a retos… y aprende a resolver sus problemas. O, si no lo hace, nos permite a los lectores ver que otros actúan equivocadamente.

Por otro lado, está eso de mal de muchos… Lo chungo no solo nos ocurre a nosotros. Hay gente que lo pasa mal, o incluso peor.

Leer es aprender

La gente que lee mejora su comprensión lectora, algo imprescindible para los estudios, pero también incrementa sus capacidades cognitivas e intelectuales. La lectura es gimnasia para el cerebro y musculación para la memoria. En un mundo en que la dispersión es constante, con internet, wasaps, redes sociales…, la lectura prolongada y profunda es lo mejor para trabajar la concentración.

Además, leer te ayudará a escribir mejor, ampliar el vocabulario, expresarte con precisión, tener mejor ortografía, saber puntuar, conocer tu lengua. La lectura es la base de la educación académica, esa que necesitas para conseguir tu eTítulo.

6 Leer alarga la vida

Científicos de la universidad estadounidense de Yale defienden que leer alarga la vida. Su investigación, publicada en ScienceDirect con el título de A chapter a day: Association of book reading with longevity ha demostrado la asociación entre lectura y longevidad. En el estudio participaron 3.635 voluntarios a lo largo de 12 años y concluyó que quienes leían tenían una supervivencia de hasta 23 meses más que los que no leían.

Además, los resultados confirmaron que los lectores que dedicaban más tiempo a la lectura tenían una ventaja considerable incluso sobre los que dedicaban media hora diaria: 23 % menos mortalidad frente a 17 %.

7  Leer es vivir experiencias

Cuando leemos una novela vivimos la misma experiencia que viven los protagonistas. El estudio científico Short and Long Term Effects of a Novel on Connectivity in the Brain demuestra que los efectos de la lectura activan las neuronas relacionadas con esas sensaciones como si las viviéramos nosotros mismos. Y el efecto perdura a largo plazo: podemos pensar en una acción que hemos leído, y las neuronas que se asocian a la acción física experimentarán cambios incluso pasado un tiempo.

Leer te hace más guapo

Bueno, en honor a la verdad, solo lo vas a parecer. A todos nos enamoran las personas cultas. Leer proporciona cultura, conocimiento, experiencia… Mejora nuestra capacidad de análisis y eleva el sentido crítico, nos enriquece mentalmente. Y eso nos hace ser personas más atractivas e interesantes a los ojos de los demás. ¿Y quién no desea gustar?

9 Leer es un placer

Leer reduce el estrés y, no menos importante, resulta entretenido. La lectura nos aporta horas de bienestar, diversión e interés. Un libro, cualquiera, hasta el peor, nos enseña algo, y de todos aprendemos.

Leer es un placer o debe serlo. No hace falta que leas a Wittgenstein si no te apetece; puedes dedicarte a Paula Hawkins sin problemas. Leer no debe ser una tortura. Diviértete eligiendo los géneros y los autores que más te gusten. Con el tiempo es posible que te gusten otras cosas. Ocurre con todo: uno puede disfrutar con la nueva cocina y sus platos elaborados con nitrógeno líquido y a la vez apreciar un buen potaje de garbanzos.