Novatadas universitarias: cómo prevenirlas

20 Sep 2019
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Novatadas universitarias: cómo prevenirlas

Empieza el curso y, con él, las novatadas universitarias. Si quieres saber qué hacer para prevenirlas o para ayudar a los nuevos estudiantes, lee esto.

novatadas universitarias

Lo de siempre

Cada año por estas fechas, un grupo de jóvenes estudiantes empieza su carrera universitaria y, cada año por estas fechas también, un grupo de abusones decide divertirse a su costa.

Que las novatadas universitarias son una costumbre repugnante, obsoleta y degradante para las víctimas lo sabemos ya casi todos, solo falta que unos pocos se enteren de una vez y dejen de hacer el ridículo. Las novatadas universitarias están terminantemente prohibidas en todas las universidades, residencias y colegios mayores, incluso a costa de la expulsión y sanciones para los participantes, pero, por alguna razón inexplicable, la gente que quiere abusar y humillar a sus nuevos compañeros siempre encuentra la forma para sacar su parte sádica a pasear.

¿Qué podemos hacer?

Si eres estudiante de primer año o ya eres veterano pero quieres hacer algo útil para prevenir las novatadas universitarias, aquí van unas cuantas ideas de cosas que se pueden hacer:

1. Mentoring. Esta práctica que ya se está llevando a cabo en varias universidades y residencias consiste en que un alumno veterano «adopte» a un alumno novato y le guíe en su proceso de integración. No solo para explicarle cómo funciona el centro educativo o cómo encontrar la cafetería, sino también para ayudar a su correcta integración social. Es una gran idea que, al contrario que las novatadas universitarias, ayuda a los nuevos alumnos a pasar por ese proceso de una forma no traumática y que fomenta la solidaridad y la empatía entre alumnos.

2. Grupos de alumnos. Cuando no sabemos a quién recurrir en la universidad o no hay nada organizado en nuestra facultad para prevenir las novatadas universitarias (aunque sí lo haya para castigarlas), los alumnos pueden agruparse para aunar fuerzas y no ceder ante las presiones que vienen de los veteranos. Si nadie se queda aislado, les será mucho más difícil encontrar víctimas. Los alumnos mayores que quieran colaborar pueden formar también grupos para detectar y denunciar estas prácticas.

3. Actividades de integración. Entrar nuevo a la universidad sin conocer a nadie e incluso teniendo lejos a tu familia y amigos como es el caso de muchos estudiantes que estudian en otras ciudades o países es muy duro. Por eso, preparar una serie de actividades que sirvan para que la gente afín se conozca sería útil y beneficioso para todos. Se pueden hacer quedadas en el campus e ir a algún sitio a partir de ahí o hacer juegos o yincanas para que los nuevos empiecen a interactuar. Solo hay que pensar en cómo hacerlo y poner unos cuantos carteles por la facultad. Seguro que se anima mucha gente y más si se especifica que son actividades organizadas por personas que no apoyan las novatadas universitarias.

Denuncia

Aunque no queramos o no podamos hacer alguna de las actividades anteriores, lo que sí debemos hacer es (además de, obviamente, no participar en las novatadas universitarias) denunciar si se va a producir o se ha producido alguna. Podemos recurrir al decano de la facultad, a la oficina de ayuda al estudiante o al profesorado para que se tomen las medidas pertinentes, pero, además, se puede (y se debe) denunciar en la policía, porque abusar, vejar o humillar a otros es un delito incluso aunque la víctima haya consentido la agresión, ya que se entiende que ese consentimiento está viciado por la coacción que supone para ella.

Las «buenas» novatadas universitarias

Hay gente que defiende que las novatadas de intensidad baja no son dañinas. Es decir, que obligar a alguien a consumir cantidades ingentes de alcohol y luego lamer ceniceros está mal, pero que hacer que los nuevos se vistan de forma humillante y paseen por la ciudad no es tan malo. Lo ven como un rito de iniciación inocente, como una forma de integración… Bueno, pues no es así. Cada persona tiene unas herramientas para enfrentarse a las situaciones difíciles, y una novatada universitaria que a un alumno le resulta inofensiva a otro le produce pesadillas y ataques de ansiedad. No hay novatadas buenas y novatadas malas, todas son novatadas, todas son humillantes, todas son un abuso de poder y todas están prohibidas y castigadas. Los alumnos veteranos no tienen derechos sobre los alumnos que entran nuevos y los nuevos no tienen ninguna obligación de doblegarse ante los mayores.

Todos estamos en la universidad para aprender, pasarlo bien, conocer gente, conseguir nuestro eTítulo y prepararnos para el futuro. Las novatadas universitarias solo dificultan el camino y hay que acabar con ellas cuanto antes.

Escrito por  root

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